Si quieres tener una noche entretenida y un tanto diferente con tu pareja; mucho mejor que hacer postres, manualidades,Tik Tok o el sin número de cosas que han surgido en esta cuarentena. Puedes guiarte con este práctico paso a paso, y juntos jugando en su intimidad podrán explorar y aprender a lograr conseguir la eyaculación femenina o squirt. Recuerden, es un trabajo conjunto, de mucha confianza y práctica, de ir conociéndose hasta el punto de encontrar la técnica perfecta para tu pareja.

Ahora, una explicación nerd, pero esencial: hay que tener en cuenta que alrededor de la próstata femenina se alojan las glándulas skene que recogen la lubricación y la transportan por canales directos a la uretra. Por eso, es que esta atípica eyaculación femenina es confundida con la orina. Así que hombres: no es que tu novia, esposa, amante o compañera se esté orinando de placer. Sí, la pasa muyyyy rico, pero el squirt es otra cosa... El squirt, o squirting, que literalmente significa “chorro” en inglés, consiste en expulsar líquido por la uretra de forma exagerada. La cantidad de líquido que expulsemos dependerá del tamaño de las glándulas de skene de cada mujer y de la duración del orgasmo ya que se suelen dar juntos. La cantidad suele ir de unas gotas hasta medio litro, lo que resulta placentero y espectacular.

¡A lo que vinimos!… Camino a la felicidad.

  • Lo primero es beber mucha agua. Cuanta más agua bebas, más cantidad de líquido sale… ¡Es obvio!
  • Prepara el cuerpo: Pídele a ella que se recueste y abra bien las piernas, preferiblemente en una cama o una superficie que le permita estar cómoda en posición horizontal. Comienza estimulando suavemente el clítoris para llenarlo de sangre y poder palparlo por dentro de la cavidad vaginal. Utiliza lubricantes para que se sienta mucho mejor. Lubricante Agua Wet Light 30 ml.
  • Introduce el dedo corazón o el anular (mejor si son los dos) por la vagina con la palma hacia arriba. No los sumerjas completamente, la próstata femenina está a escasos centímetros de profundidad. Detrás del hueso púbico para ser más exactos. De hecho se puede sentir con las yemas, es una superficie algo rugosa que si se presiona deja sentir el hueso púbico, lo sabrás porque comenzará a sentir (ni ella sabe cómo describirlo) una sensación parecida a la de querer orinar.
  • Una vez ubicado el punto, comienza a masajear aumentando frecuencia y presión. Sentirás que la próstata de tu pareja comenzará a crecer, casi comparable al tamaño de una almendra. Has movimientos circulares, lineales, toques rápidos, empuja hacia arriba. Lo importante es hacer presión como si se estuviera pretendiendo tocar el hueso púbico. Atent@s porque es posible que en esta etapa ella experimente un orgasmo sin eyacular. Lo bueno de esto es que hace parte de la labor de ejercitar la próstata, así que vuélvanlo a intentar porque las mujeres logramos tener un orgasmo tras otro con facilidad. Para esta fase el uso de un juguete puede ser de gran ayuda, por las texturas que tienen, y la firmeza con la que logra la estimulación.  Vibrador Santa Mónica Starlet Doble Estimulación.
  • Y como nuestra meta es llegar al Squirt. Combina los movimientos anteriores y pídele a ella que haga contracciones intermitentes de los músculos que liberan o retienen la orina. Esta práctica es conocida como el beso de Singapur y muchas mujeres la utilizan para potencializar y prolongar por varios segundos más el orgasmo. Estimulación, contracciones y sensación orgásmica ayudan a la producción de abundante lubricación, que continuamente es recogida por las glándulas skene que les mencionamos antes.
  • Continúa frotando el Punto G, rota el dedo, si tienes un juguete, será más sencillo (no te cansarás tanto). Presiona, no pares; continúa estimulando con delicados frotes y presionando sobre el hueso púbico. Mientras más excitada esté tu chica, hazlo con más fuerza. No tengas miedo, no vas a lastimarla, en este punto ella se está sintiendo inundada (Literal) y disfrutando un placer que va en delicioso aumento. Los dedos deben moverse haciendo la técnica del “ven acá”. En cambio, cuando usas un juguete de valvulitas de pulsación, déjalo quieto, el hará casi todo el trabajo. Cuando ella sienta muchas ganas de orinar, debe levantar las caderas presionando las nalgas y continuar con la masturbación fuerte hasta producir el squirt. Los resultados y la cara de ella no dejarán duda de que la tarea se ha cumplido. Vibrador Trysta Punto G con Movimiento

    ¡No mueras en el intento!

    • Si la sensación de lograrlo se escapa, repite hasta conseguirlo. Se requiere de práctica previa y mucha concentración para lograr el squirt.
    • En el momento de la eyaculación retira rápidamente los dedos de la cavidad vaginal, ella debe pujar sin dejar de contraer las nalgas y con la cadera elevada. Termina dando un masaje circular con varios dedos sobre los labios mayores que cubren el clítoris. Gesto de dulzura y amor que apreciará.
    • Es importante la estimulación del clítoris, ya que cuanto más crezca, más crecerá también el punto G y más excitada estarás. Son todo ventajas. Recuerda que uno de los favoritos para este menester es nuestro amado Succionador Clítoris Satisfyer Pro Pingüino.
    • Sentir es lo esencial, concentrarse es fundamental y creer que se va a lograr más que necesario. Lo importante es entregarse a la sensación y dejarla fluir. No todas las mujeres eyaculan en el primer intento, es cuestión de conocerse sexualmente, estimular correcta y frecuentemente. En todo caso, lo que te garantizamos con este paso a paso, es que será un momento increíble y, puesto que el squirting no es fácil de conseguir sin práctica, al menos te llevas un buen ratito, eso no te lo quita nadie.

    Aún así, te animamos a probar y no darte por vencida. Seguro que intentarlo vale la pena. Sin embargo... ¡No te obsesiones! Pásalo genial intentándolo y ten paciencia. Recuerda que lo que provoca placer en el sexo es la liberación de la tensión. Hay que romper muchas barreras para dejarte llevar y superar la sensación de orinarse encima. Te esperan unos buenos deberes para esta semana. ¡En marcha!

    01 junio 2020 — Patricia Gómez

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